555

Por: Ángel Largo Méndez

En el Congresillo, cinco cargos de siete: no está nada mal. En el Consejo Electoral, cinco afines de cinco: resultado impecable. En las elecciones de los últimos dos años: cinco elecciones de cinco: récord perfecto. En la práctica, créditos 555: pocos afortunados.

555. No sé si sea el número predilecto del Gobierno, pero si marca de alguna forma su accionar político. A lo mejor es que le gusta los números repetidos, 444 artículos en la nueva Constitución no creo que sea una cantidad al azar.

No estudio numerología pero, si ese número le ha dado tantos resultados al verde limón, a lo mejor pueden servir como clave para una analogía de equidad e igualdad dentro de la sociedad que tanto busca implantar la Revolución actual.

¿Porqué no? Veamos, si a la democracia real de los ciudadanos, se le da un 5; al espacio a la oposición o minorías, también 5, y un Estado prudente y decidido, otro 5. O 4 si desean… como sea, tendríamos la fórmula perfecta para un sistema de contrapesos novedoso e incluyente. Una verdadera revolución de pensamientos, que Machiavello se revuelque en su tumba!

Pero hasta la fecha, noto que en vez de funcionar como sinónimos de equidad se han convertido en signos de poder. Un poder embrutecedor, que va desgastando un proceso político ciudadano que no se puede dar el lujo de anularse asimismo.

La base de un proceso social, de ese infantilismo de izquierda que critica el presidente Correa, justamente es promover la voz del ciudadano, del animal político, del soberano. Es impulsar una democracia real y activa, donde los actores sean desde la persona más humilde hasta el más adinerado pelucón.

¿Qué ocurre cuando, los nuevos alquileres del poder, pasan a formar parte de las filas de la burguesía y se apartan de su cuna popular? Es sumisión al nuevo jefe, es restricción a la voz del pueblo, es más marginación al excluido y mayores sirvientes a la codicia. En términos numéricos, el 555 de la igualdad se transforma en un 129, o un 248, utilizando el orden anterior.

Algo pasa en el Gobierno. Muchos de sus “líderes” se han sujetado a los placeres de la poliarquía. Sin espacios a réplica, poder absoluto en la Comisión Legislativa y control total en el Consejo Electoral. Solo la quíntuple decisión ciudadana en las urnas no es cuestionable, pero ¿tendrán su espacio para participar más allá del sufragio?

Hay espacios de ciudadanos organizados que buscan incentivar el control social a las acciones de un Gobierno sin contrapeso alguno. La nueva Constitución lo permite y exige (una de las razones por las cuales di el sí) por lo cual su accionar futuro no debe ser cuestionado ni limitado, ni infantilizado.

Nuevo reto para el Gobierno: demostrar que es diferente. Falta mucho por hacer y elegir y todos deberían tener la oportunidad. Esa debería ser la piedra angular de la Revolución ciudadana, junto a los ciudadanos. A los actores reales, el proletario, el explotado. No se puede ingresar a la lucha de clases despreciando a tus propios aliados por una tajada de la otra mitad.

Si no es así, a este Gobierno con el tiempo se lo recordará con otro número repetido: el 111. ¿Recuerdan el chiste del médico malo?

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Ja, ja...

Estimado Ángel

Si sigues con la numerología lo lógico sería tener el 444, el 555 y el 666. Que es el número perfecto para el gobierno una vez que perdió el 3, que para los griegos era un número perfecto pues proviene de los pares e impares, de lo masculino y lo femenino,.... El gobierno se quedó en el Uno y terminará como Uno, rechazado por su postura neoliberal extractivista, concentradora de poder y alejada cada vez más de la ciudadanía.

Por ejemplo, hablemos del famosos Consejo de Participación Ciudadana. El Quinto poder. ¿Has revisado la lista de candidatos que se proponen y que se presentarán esta tarde? No recuerdo todos los nombres pero ahí te van algunos, son unos ases que buscan ganar el poker del poder.

Fernando Buendía, que es alterno de Tatiana Hidrovo miembro de la Comisión Legislativa y de Fiscalización que tiene a su cargo, entre otras, la Ley que Regula el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social? O sea militante de Alianza País. Qué care tuko (con k porque ahora recuerdo que le expulsaron de Pachakutik junto con su ñaño Asambleista Virgilio Hernandez).

César Cárdenas (creo que en Guayaquil ya conocemos como actúa, sin embargo solo para recordar apoyó al gobierno, luego se decalaró arrepentido y ahora es candidato o sea hasta ahora no le ha salido la jugada), Alexis Ponce (sí el de la APDH, miembro de la Comisión de la Verdad que a la hora de la Verdad está quedando perdida en la noche correista. Bueno renunció a ella, ha criticado al gobierno pero te matarías de la risa al ver como va cambiando su posición según la coyuntura -revisa debateducación del último año),

Ah, a estos personajes acompaña Luzmila Álvarez, de la Coordinadora Política de MUjeres- brutita pero ágil como un gato para el oportunismo-, conocida miitante de la ID y ahora perruñeando por un cargo.

¿Quieres que tenga esperanza en este proceso? El amo sólo está buscando perros de caza, buenos ladradores, que se conformen con las migas que caen de su mesa (la verdad es que con esas migas se puede vivir bien hasta la tercera generación) y nos metan el dedo con vaselina "Ciudadana". Estos ilustres te aseguro no resistirán ni siquiera la mirada del amo, caerán postrados, en cuatro y la ciudadanía nuevamente será entucada. ¡Qué care tucos!