... Y les dicen "minorías"

Por: ALM
De repente, mi bachata mañanera fue interrumpida de súbito. Al principio pensé que era uno broma, y es que la emisora favorita de choferes y taxistas juegan mucho al doble sentido, pero no, era algo real, que en pocos segundos se convirtió en tema de discusión para mi blog.

Era el segundo capítulo de Las Aventuras de Giovanna, una radionovela nacida del esfuerzo conjunto del Consejo nacional de Mujeres Ecuatorianas Negras y la Unión Europea. A manera de resumen, la historia se centra en un pequeña niña negra, Giovanna, que junto a su madre y su abuela, luchan por sus derechos contra el malvado dueño de la hacienda donde trabajan.

Cinco minutos de una excelente producción radial fueron suficientes para que las cinco personas que íbamos en el carro amarillo tengamos una lección de vida. En la narrativa, Giovanna y su familia sin palos, ni piedras ni insultos, logran convencer a su patrón que necesitan de agua para sus cultivos, y pueden regresar al trabajo con la misión cumplida.

Me bajé del auto y durante el largo y caluroso recorrido de once cuadras hasta la oficina fui uniendo y atando cabos. No era ni las 08:00 y aquel martes 20 de enero ya había recibido tres fuertes mensajes de reivindicación social de las mal llamadas “minorías”. La historia de Giovanna, el levantamiento contra la Ley Minera y la toma de posesión de Obama.

Fieles a su convicción ideológica y ancestral, los indígenas están convencidos de que la Ley Minera será perjudicial para el país. Y digo país porque sin una discusión democrática y consensuada de la realización de minería a cielo abierto los efectos ambientales y culturales que causaran las transnacionales serán lamentados después.

Semáforo. Recapitulo…la historia de Giovanna en cambio es un ejemplo para cualquier clase oprimida. Aunque nos suene a canción trillada, no hay nada más cierto que la unión y decisión son las herramientas para ganar dignidad y respeto ante el opresor. ¿A cuantos no les ha pasado el caso de Giovanna? Y ¿supimos reaccionar de esa manera valerosa y firme? Lecciones de vida en pastilla pregrabadas.

Y lo de Obama sabemos que representa. Más allá de un cambio radical de la política estadounidense (escuchaba por ahí: blanco o negro, yanqui es…) su posesión simboliza la cristalización de un sueño. El demostrar que la igualdad de derechos sin cuestiones raciales es posible y factible. Un empujón a las causas justas y libertarias de millones de explotados y marginados por su color de piel, que encarnan en el nuevo hombre más poderoso del planeta la esperanza de un mundo mejor, sin blancos, ni negros ni nada, solo hombres.


Al virar en la esquina, me doy cuenta que con connotaciones distintas, los tres eventos son una muestra de los pasos cada vez más acelerados de los pueblos afroamericanos, indígenas, amarillos, cholos, montubios y tantos otros por conseguir una mayor inclusión social, abanderando la lucha por los derechos civiles y sociales. Pesa a ser considerados esfuerzos de grupos minoritarios, la gran verdad es que asumen con dignidad el reto de lograr la igualdad de oportunidades sin sesgos raciales o económicos que muchos de la “mayoría” ni siquiera intentan comprender. A veces nos consideramos partes de un todo pero somos parte del nada, porque la vida digna está entre quienes se conocen irrespetados pero no inferiores, y no están dispuestos a sentirse conformes…

Antes de que se abra el ascensor, lo he decidido…

Dejaré de quejarme y abonaré al cambio.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Señor Largo.
Mr. Obama , no representa a la minoría , sino a la mayoría de un pueblo. Pensar que representa a la minoría, es hacer prevalecer el racismo , y no el proceso democrático que elimina las diferencias de razas, que lo que si representa Obama. Ojalá en e Ecuador, podamos llegar a terminar un proceso similar, que si bien está avanzando, hay voces y gentes, especialmente algunos de los indígenas, que ponen su circunstancia racial sobre lo que la mayoría piensa o hace.

Ángel Largo Méndez dijo...

Amigo Roberto:

Gracias por tu comentario. Mi post apunta acerca de los simbolismos de su posesión del poder donde, indiscutiblemente, se tejen los anhelos y esperanzas de todos los norteamericanos y el mundo, pero sobre todo, de los millones de afroamericanos que ven en su figura el sueño encarnado de una sociedad sin ataduras raciales o sociales.

Por eso el título, Y les dicen minorías.. a manera sarcástica, ya que su ubicación etnográfica los sitúa en un sector del conglomerado social. Más de allá de cualquier realidad latente, Obama es negro, sí, y su poderío mediático a nivel mundial radica en ello: Un ejemplo viviente de que las mal llamados minorías (porque aunque hay millones de afroamericanos en EE.UU., son menos que los blancos, y eso los hace minoría cuantitativamente hablando) son los primeros en entablar la necesidad de un mundo más igualitario, no solo a favor de ellos, sino de un conjunto, sin tintes étnicos, sociales, culturales o económicos.

Sobre el asunto indígena, creo Roberto que en parte su lucha es identificable con varios de los pedidos que la "mayoría" le piden a gritos al presidente Correa: una participación más democrática y abierta en las tomas de decisión ¿Revolución ciudadana talvez?, podrían ser símiles. En todo caso, más allá de los inscritos intereses políticos de varios dirigentes indígenas (no de sus bases) creo que deberíamos todos poner más atención en que nos beneficia la lucha del pueblo auctóctono.
Saludos

Anónimo dijo...

Angel.
Lo sobresaliente de la lucha indígena, es su frescura y su carencia de ataduras con el sistema, que en cambio otros no son francos en reconocer. Que existe un sistema dominante , dominados y dominadores, no debe escandalizarnos, lo que nos debe escandalizar es pensar que ése es EL SISTEMA y la soluciòn del Ecuador. Tampoco, la soluciòn socialista lo es. Ni lo es la soluciòn capitalista. En fin, es un conjunto de soluciones que deben partir del consenso, el sentido común, y la conveniencia social y económica. No siempre lo perfecto es lo viable ni lo mejor, sino lo excelente, y lo excelente es el equilibrio, el punto medio, y no el extremo.

Bueno, siempre es un gusto discrepar o explicar (intentando) nuestras ideas.

Saludos
Roberto

Ángel Largo Méndez dijo...

Concuerdo perfectamente con tu idea de consenso Roberto. Es necesario y urgente. Talvez si entre las mismas tendencias ideológicas iniciarán con la unión y equilibrio de ideas, sería más sencillo intentar un proceso más democrático en el país.

Un gusto y estamos en contacto